la noche a veces se transforma
por obra de conjuros y menjurjes
que le llegan de lejanas estrellas apagadas
en una bolsa de papel llena de ruidos
y escuchamos llanto de niños cuando el gato grita
y los perros que tiran los botes de basura
acomodan morosamente sus ladridos
cuando
nos traen pesadillas inundadas de balazos
3 comentarios:
este post se portó de forma muy extraña, nunca aceptó la fecha que le tocó,. tuve que copiarlo de por allá hace 10 días o más... ¡loco!
Son los misterios de la noche de Blogger, parece.
Buen poema. Me hundí un buen rato en interrogantes, en cosas ocultas, tratando de descifrar llantos, gritos y balazos.
Un beso.
¡qué bendición que no hayan llegado a más, Fita!
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