Esquina lingûìstica
La veo al doblar la esquina. Está parada con otro, no hacen nada, aunque se mueven, pareciera que nerviosos. Caminan en la misma dirección que yo lo hago, aunque ellos avanzan por la acera contraria. Se detienen, otro se les une y continúan. Los miro mientras camino y me doy cuenta de que ella es muy peculiar.
Es una perra.
Blanca, tamaño regular, en su cara, cubriéndole el ojo derecho tiene una mancha negra. Lo que la distingue de otras perras y perros es el ojo que está tras esa única mancha negra en su pelaje blanco… es azul cielo, tan claro que parece blanco; el otro ojo, en cambio, es común, negro o café. Entonces, al mirar, perturba esa extraña percepción bicolor que parece tener, aunque quién sabe.
En la esquina siguiente me detengo para verlos, uno de ellos intenta montarla, parece que con demasiada anticipación porque es rechazado. Entro en una tienda a comprar algo que absolutamente nada tiene que ver con esto y al salir veo que siguen allí, ella y cinco perros, parece que echan a la suerte quedarse con ella, hacen fintas, suben uno primero sus patas sobre su lomo y luego otro, en lo que parece un cortejo tumultuario, no hay violencia sin embargo, no ladran ni accionan como he visto hacer a otros perros, no parecen tene prisa.
Ella no parece darse cuenta de que los perros están allí por sus ¿encantos? La huelen buscando lo que perdieron hace siglos, pero esa perra parece desconocer esas razones, sólo se queda allí, como si no existiera, con su expresión de peluche.
Y me pregunto por qué será que a veces se utiliza la expresión “eres una perra” refiriéndose a una mujer. Lo único que apresuradamente puedo responderme antes de seguir mi camino es: le dicen perra a la mujer que trae tras de sí a hombres que la siguen como perros, babeando. Y con sólo una cosa en ¿mente?
Ouch, què dije.
4 comentarios:
Y sin embargo en Castilla ser un perro es ser un perezoso. Puedes decir "Estoy muy perro", y le gante simplemente te mirará con aire de superioridad (maldito vago), pero si dices "Estoy muy perra", ya tendrás a 5 ó 6 alrededor, con sus expectativas correspondientes.
jejeje... ay, Fita!
Definitivamente muy relacionado con este cambio de estación,
¡qué perrón!, neta que sí, jeje.
borf!
bua bua bua buah...
(¿o guau?)
Me trajiste a la memoria el primer cuento que escribí, era sobre perros. Así que, impactada, volveré después a releer y comentar.
Besos ahora...
esa mirada de peluche en medio del tumulto... esa mirada...
saludos desde tijuana.
Publicar un comentario