martes, 11 de diciembre de 2007

Siempre no

Ahora nieva y lo lamento tanto pero no puedo hablar de los pedazos helados de cielo blanco que se desploman con lentitud flotante. He pensado el día entero en el arrepentimiento ¿Qué es? Es dolor o pesar por alguna vez haber hecho o dicho algo, creo. Nunca me ha gustado esa idea, porque casi no sirve de nada salvo para estancias lejanas a este nuestro estar diario. Otro asunto es desear haberlo hecho mejor, o diferente. Esto último sí nos ayuda porque podremos intentarlo de nuevo y tal vez con mejores resultados. Pero desear no haberlo hecho, porque estamos seguros de que aquello echó todo a perder… eso sí que es una certeza que jode.

El arrepentirse jamás cambiará las cosas, un acto que fue presente y que irremediablemente se convirtió en pasado fue la causa de otros presentes y de algo que no existe y que nunca existirá y que se llama futuro.

¿Por qué entré ese día en ese callejón soleado? Todo lo que en los casi diez años posteriores ha sucedido fue resultado de esa decisión… Toda nuestra vida dizque presente es producto de una serie de actos, palabras, pensamientos. Pero hay ciertos actos anodinos, insignificantes, que desencadenan con mayor fuerza toda la bola de nieve que pudo haberse quedado guardada para siempre a derretirse sin lastimar.

2 comentarios:

JeJo dijo...

Y la noche del martes 04 se convirtió en tarde de este miercoles ... y vine y me encantó "Entrevista ..." y se me confundieron los interlocutores, o es quizá sólo un monólogo ... Bello y triste.

"Siempre no" es duro y cierto.
Tan (adaptable?) a esta especie que suele tropezar dos veces con la misma piedra.
Y, el alud nos tapa y recién ahí pensamos que fué lo que lo originó; cuando estamos (pocas veces nos arrepentimos por el otro) hasta el cuello (o más) de nieve ...
Pero, ni modo vivir con un sismógrafo en el corazón y otro en la cabeza.

Me quedaron los dos últimos de noviembre.
Para mí los hoteles restan.

Saludos que suman.

Mari dijo...

Este y el otro, el de la lluvia, me hacen pensar en cosas que están afuera (lluvia, sol, nieve, agua, viento) y también tienen su correlato dentro de nosotros.