viernes, 28 de abril de 2006

"Toma de mí el líquido de los pechos y enjuaga los púrpuros deseos, de allí se despiden las algas, líquenes las hierbas para el potro hambriento. en mi vientre se funda la razón y se pulen los aceros." Francisco Mir

El viento es un lugar para los papalotes, el rehilete, los barcos de vela. El viento nos llevará, sin duda, al reino de Oz, ¿el terrible?
El viento mueve árboles, a veces los asesina, los deshoja. Deshace las flores, tantas, de la primavera. Hace rechinar los techos, provoca los insomnios tristes, construye los sueños desolados.
El viento seca la ropa, se lleva las nubes.

El viento nos trae nubes. Que presagian lluvia. Nos trae palabras húmedas y resbalosas. Nos hace caminar a tientas por la luz, nos lleva. Nos trae.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

qué palabra seremos en ese desfallecer involuntario?...
qué letra
habrá algún viento que nos lleve?

jose fá dijo...

no hay letra que se oponga al leve caminar del viento, ni a los presurosos pasos de los ventarrones... pero la palabra ¿cuál seremos que nos ate al caminar sereno?

Anónimo dijo...

las palabras
esos seres
que se cruzan
como el viento

esos seres
que sin pretenderlo
a veces
nos borran

jose fá dijo...

Ojos... querido