Los amados
No tienen ya nada que decirse
la última palabra voló cual diente de león
quemada por el sol de algún verano
y buscan entre el lodo y el silencio
gestos
miradas
o saliva
que puedan compartir
hoy que es invierno
siempre lluvioso
cuando te fuiste
me quedé como ventana
abierta
y el mar llegó de pronto
se metió poco a poco
me dejó salada
y fría
para siempre
camino y siento que me miras
no sé qué mirarás
si el cabello
mis zapatos
las huellas que los pies avientan sobre el lodo
las nalgas, mis piernas o el vestido
lo que sea que ahora mires
no volverá
nunca
contigo
Fui la flor, aquella...
Perdida para siempre de tu olfato
ajena de tu tacto para siempre
Alguien pasa y tira piedras
Yo no sé de dónde vienen las pedradas
Todos ríen
A todos les cuentan cuentos
(Cuentos que son como pedradas
en los humedecidos techos del invierno)
Alguien pasa pateando piedras
tratando de esquivar el ruido
de mi llanto
Entibiado como palomita
en las manos memoriosas
duerme el deseo
que por ti movió mi vida
alguna vez
Un día
No creo en fantasías
ya no más
pero a veces
me asaltan
en cualquier esquina
los perros
y son silenciosos animales
que no ladran
sólo me babean
me llenan todo el cuerpo
de sus inmundicias transparentes
y no quiero creer que estos perros existen
pero tampoco que son
producto de mi fantasía
porque ya no creo en fantasías
dejé de hacerlo
hace algún tiempo
anoche dejé de quererte
de improviso
ahora estoy como tortuga
liberada del caparazón
al descubierto
sin ese fardo encima
pero expuesta, desvalida
desde anoche
no tengo escudo
ya no te quiero más
4 comentarios:
Me pregunto por qué hay cero comentarios.
¿Será porque nadie se siente amado?
o todo lo contrario...
Quiebro tambien yo el cero diciendo que me encanta tu poesia.
Alguien pasa pateando piedras
tratando de esquivar el ruido
de mi llanto.
He aqui las lineas que un poeta busca y lo entregue a un estado de maravilla.
Te celebro.
Agradezco tu visita y comentario oportuno.
Este abrazo. Y hasta pronto. Asi sea.
¿ya ves que fue un buen anzuelo dudar?
La duda mueve montañas.
Saludos, Fita y Don Máximo.
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