jueves, 23 de marzo de 2006


Cascadas
"No se pueden desatar los nudos del tiempo
sin romper el hilo"
(frag. 1)

Un botón. Sólo eso necesitamos para caminar. Me he convencido que la calle no existe, que no existe la ciudad. Todo este mundo es una banda por la que nuestros pies se mueven, somos hámsters dando vueltas. Es muy fácil cerciorarse de lo que hoy afirmo, sólo hay que establecer un ritmo constante y regular en nuestras piernas, los pies moviéndose ajenos a nuestras intenciones, bajar la vista lo más que se pueda, mirar siempre el suelo, y así veremos el mundo moverse debajo de nosotros. Yo tampoco lo creía.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El fenómeno Hamster... ése. ¿quién habrá de detenerlo?